Los empastes dentales en niños en dientes de leche precisan diagnóstico con radiografías
Inicio » Tratamientos » Odontopediatría »Los empastes dentales en niños son intervenciones de lo más comunes cuando a un diente de leche le sale una caries (caries de primera infancia o ‘caries del biberón’). Se aplican si hay molestias y/o dolor, si el diente no se mueve y no está a punto de caerse.
Se trata de eliminar el tejido en mal estado y sustituirlo por un material artificial que permita al diente seguir realizando su función, de lo contrario el diente terminará por ser un material blando y ennegrecido por el ataque de las bacterias.
En los dientes de leche la mayoría de las caries se localizan entre dientes y su diagnóstico, en las fases iniciales, sólo es posible realzarlo con radiografías. Esta prueba ayuda a valorar la profundidad de la caries y evaluar el posible tratamiento a iniciar.
La técnica utilizada en los empastes de un diente de leche variará dependiendo de cuánto diente se ha perdido y de la edad y colaboración de los niños. Si son muy pequeños se realizan técnicas de restauración atraumática (TRA). Consisten en limpiar el tejido en mal estado manualmente con un instrumento muy pequeño llamado cucharilla, sin torno y sin anestesia, que incomodan mucho a los niños pequeños.
Colocamos un material a base de cemento de vidrio, que además libera flúor en los límites entre empaste y diente, dificultando así que salga una nueva caries alrededor del empaste.
Estas restauraciones no son definitivas. Ayudan a disminuir el progreso de la caries, pero no restituyen la anatomía ni la estética, que sí se puede conseguir en niños mayores.
En caso de caries en niños mayores, sí se hace preciso anestesiar, porque vamos a entrar en zonas del diente o de la muela más profundas. Limpiamos mucho y empleamos, normalmente, o amalgama de plata o composite. La diferencia entre ellos es básicamente estética. Mientras que la amalgama de plata se ve mucho, el composite apenas se nota a simple vista. La elección del material dependerá de la pieza dental y de la parte (esmalte, dentina o pulpa) que hay que obturar.
En el caso de que la caries haya provocado ya un agujero en el diente, colocaremos una corona metálica, que hará la función de mantenedor de espacio. Se reservará así el espacio para que el diente definitivo nazca sin problemas.